Palacio de Gelmírez o Arzobispal (Santiago de Compostela).
En Santiago, las casas palaciegas tienen su ejemplo más antiguo en el llamado Palacio del Arzobispo Gelmírez, que con el de Don Pedro I de Cuéllar (Segovia), está considerado uno de los mejores exponentes de la arquitectura románica civil.
Está situado entre la plaza de la Inmaculada y la calle de San Francisco, y enfrentado por este lateeral con el Hospital Real.
El palacio nuevo fue construido a mediados del siglo pasado y lo fue en parte sobre el Palacio medieval. No se conocen bien los orígenes del Palacio primitivo, pero parece ser que fue destruido en las revueltas del siglo XII, 1117, y lo tuvo que construir Gelmírez hacia 1120 haciéndolo con una suntuosidad de la que antes adolecía dado que a Compostela acudían insignes personajes en peregrinación. De las ampliaciones que se llevaron a cabo en tiempos del arzobispo don Juan Arias hacia 1260 procede la obra cumbre de la arquitectura civil gótica en Galicia y que es el gran Salón Sinodal o de los Concilios dirigida por el maestro arquitecto Pedro Boneth.
También en los siglos XV y XVI se fueron añadiendo más salas y dependecias destacando en esta acción ampliadora don Lope de Mendoza y don Alonso de Fonseca. De 1575 es el cubo que sobre sale hacia la plaza del Hospital y que fue construido sobre un viejo torreón. La fachada actual, que oculta a la atigua, es de tiempos del arzobispo don Maximiliano de Austria.
El Palacio antiguo, como hemos comentado, es una de las obras capitales de la arquitectura civil española en la Edad Media.
Tiene planta en forma de T y la torre la divide en dos agrupaciones constructivas, la más antigua de dos plantas, y la adicionada después de tres. El acceso a los salones medievales se hace por la plaza del "Obradoiro" (o de España) a trevés de una `puerta abierta en la fachada occidental del Palacio. Un arquitectónico vestíbulo comunica con el patio y con el gran salón de la planta baja, formado por dos crujías de cinco tramos, cubiertas con bóvedas de arista. Estas se apoyan en arcos de medio punto sobre esbeltísimos pilares que están formados por un haz de cuatro columnas con capitales de fina decoración vegetal. De este salón se pasa al llamado"Arco de Palacio", prolongación hacia el norte de la parte antigua. Una escalera nos lleva a lo que fue cocina románica.